[Análisis] Contrast
Buena parte de los videojuegos desarrollados por estudios poco conocidos o independientes no logran llegar más allá de plataformas como Steam, pero si a esto le sumamos un buen productor, se pueden obtener éxitos del nivel de Limbo, Guacamelee o Amy, títulos capaces de llegar a todas las plataformas existentes.
En este mismo mundo encontramos a Contrast, juego desarrollado por Compulsion Games, un joven estudio canadiense, y producido por Focus Home interactive, recordado por el título de la serie Game of Thrones, además de la saga Wargames.
La historia de Contrast se centra en Didi, una pequeña niña, y su amiga imaginaria Dawn, nosotros seremos esta amiga, un poco sombría y lúgubre, pero con facciones y movimientos muy sensuales. Seremos invisibles al mundo que nos rodea, a excepción de Didi que puede vernos y hablarnos. Para nosotros las personas no son más que sombras en este mundo y es la única forma de notar su existencia. La historia se enfoca en ayudar a Didi con los problemas que tienen sus padres, que serán más de uno por capítulo.
Estamos ante un juego sorprendentemente largo en historia, de inicio no pensábamos que nos llevaría más de un par de horas, pero después de jugar más de 8 horas entendimos que esto iba para largo. Aunque algunas misiones lograron mantenernos entretenidos, ya sea por la trama, la narrativa o la jugabilidad, la mayoría tienden hacer muy lógicas, fáciles de entender y sin mucho aporte argumental. Lo que sí tenemos que destacar es que son muy diferentes y poco repetitivas.
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En cuanto a la jugabilidad encontramos una nueva característica: la posibilidad de explorar desde las sombras. Nuestro personaje podrá entrar en este mundo y moverse por su interior siempre y cuando haya una luz intensa que permita su proyección, además, en algunos casos podemos modificar la sombra para acceder a otros lugares con objetos del escenario.
Cuando movemos el joystick suavemente, Dawn tiene una forma de caminar adecuada aunque presenta algunos movimientos bruscos en sus desplazamientos, pero cuando corremos es donde más problemas notamos, la rigidez no solo aumenta y el comportamiento de Dawn parece sacado de juegos de hace dos generaciones, además, los brincos o saltos son tan poco consistentes que en muchas ocasiones no llegaremos a donde deberíamos.
En los movimientos en las sombras vemos un buen trabajo, algo más estable y estructurado, aunque repetimos, los brincos dificultan todo, incluso en este mundo. En general, encontramos un título con una forma de juego muy complicada, enredada y que solo permite buenos movimientos en el interior de las sombras.
En el apartado sonoro se nota un buen trabajo, presentándonos esa música de cabaret tan distintiva de los años 20 con unas representaciones muy adecuadas que contribuyen magistralmente a su ambientación. El juego tiene audio en inglés subtitulado, las voces son excelentes y representan a la perfección los acontecimientos del juego. Queremos destacar la banda sonora, hecha por Nicolas Marquis, que escucharemos bastante en los cabarets, bailes o introducciones. En el siguiente video podrán hacerse una idea de lo que estamos hablando.
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Gráficamente vemos un buen trabajo. Las edificaciones, aunque no son muy reales, están bien hechas, pero no se puede negar que por el motor gráfico usado (Unreal Engine 3) esperábamos mucho más.
Hablando de la versión mayor (consolas de next-gen y PC), vemos un trabajo muy detallado en iluminación, exprimiendo a un buen nivel los Physis, y mostrando una iluminación por capas muy bien elaborada, algo del mismo nivel de títulos tan destacados como Metro: Last light.
En general, Contrast es uno de los pocos juegos que hoy en día intentan aportar algunas nuevas características al mundo de los videojuegos, pero esto no compensa la jugabilidad tan complicada que presenta, algo que puede llegar a aburrir muy rápido a cualquiera. No obstante, es bueno ver que una desarrolladora independiente nos presente un juego de este nivel, lo que demuestra el potencial de los “indies” y la proyección que pueden tener en las nuevas consolas.
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