GTA 5 y cómo la siguiente generación comienza con Rockstar Games

La saga Grand Theft Auto no necesita publicidad, pero es necesario ser coherentes con la verdad. Hace nueve años GTA: San Andreas demostraba cómo la sexta era podía brindar un cautivante e interactivo mundo abierto, con un estado ficticio que servía como crossover de sus contrapartes reales (California y Nevada) y tres ciudades principales para recorrer. Adicional a esto encontrábamos un extenso campo abierto y desiertos, con una buena cantidad de vehículos terrestres, aéreos y marítimos.

No fue el juego que cerraría dicha generación, pues después llegarían otros grandes como Metal Gear Solid 3: Snake Eater y Bully, este último también de Rockstar Games, títulos que hicieron su significante aporte a una época que fallecía tras el nacimiento de la séptima generación de videojuegos, iniciada por Xbox 360 y seguida por PS3 y Wii.

Culminaba una era y nacía otra. La industria había vivido en solo seis años el crecimiento de una franquicia que había alcanzado su éxito con la evolución 3D. La trilogía de Grand Theft Auto era el mejor referente en cuanto a mundos abiertos se hablaba, con algunos clones que aspiraban con ingenuidad superarla, fallando miserablemente. De esta manera el mundo esperaba el siguiente paso, la era HD.

GTA IV era aquello que Rockstar quiso hacer desde un comienzo, era el sueño plasmado en la realidad digital. Las limitaciones técnicas lo habían impedido, pero con el nuevo poder en sus manos brindaban todas las maravillas y secretos de Liberty City en una increíble alta definición. Tal como habían separado las primeras entregas con vista de pájaro de sus ediciones hermanas en 3D, la era HD hacía parte de un universo completamente diferente, una especie de comienzo desde cero, o un salto a la época moderna después de 80’s, 90’s y comienzos del nuevo milenio retratados en el pasado.

Lo más importante, aunque el juego ya presentaba en anteriores entregas una historia fragmentada para cada título, contada según el libre albedrío del jugador a la hora de tomar las misiones que deseara y avanzando en el rango hasta ser el más temido por la ley, sería Niko Bellic quien nos daría el ejemplo de cómo contar una buena historia unificada en “la peor ciudad de América”.

Claude, Tommy, Mike, Carl, Toni, Victor, todos quedaban en el pasado. Niko, Johnny y Luis pusieron la cara en el universo HD con las diferentes historias que se movían en el oscuro mundo de Liberty City, comprobando a su paso que tres cabezas son mejores que una. Las expansiones a modo de episodios solo fueron una excusa para aprovechar durante más tiempo, cinco años para ser exactos, toda esa urbe viva que el equipo de Rockstar Games había creado, con gran cantidad de misiones alternas, mini juegos, easter eggs y palomas, muchas palomas.

De esta manera se pensaba haber llegado a un final en la generación HD nuevamente con trilogía, si contamos las historias de Johnny Klebitz y Luis Fernando López parte de una junto con la de Niko Bellic. No había razón para otro juego más en las actuales consolas cuando la misma base de GTA 4 sirvió para impulsar a PS3 y Xbox 360, pero Rockstar Games no había dicho la última palabra. Esta generación aún no terminaría, por lo menos hasta que ellos lo dijeran, claro.

No es sobre Ultra HD, es sobre jugabilidad y mundo abierto…

En algún momento existirá un Grand Theft Auto para la octava generación de consolas, eso está claro, pero aún un poco lejano, y muy seguramente no veamos reediciones de Liberty City, Vice City o San Andreas para aquel entonces. Sin embargo, aterrizando nuevamente en la era actual (HD), vemos como Rockstar Games quiso entregar al público un último gran deseo después de hacer de la ‘ciudad de la libertad’ algo mucho más real, dentro de lo que cabe la palabra.

Vice City quedó en el pasado debido a las pocas ganas de la compañía en volver a una gran urbe única y exclusivamente. Debido a ello San Andreas sería la región escogida para ser redibujada, más exactamente por la ciudad de Los Santos, alejando de esta forma a San Fierro y Las Venturas del mapa pero ampliando el espectro con un espacio rural mucho más extenso y lleno de contenido, que en cierta forma hereda los mejores aspectos de Red Dead Redemption y el salvaje oeste americano.

Recibir un nuevo Grand Theft Auto a estas alturas, a puertas de un salto generacional que traerá tecnología mejorada y finalizando el ciclo de consolas de PS3 y Xbox 360, solo significa una cosa, y es que GTA 5 se traduce en el cierre con broche de oro de la séptima generación de consolas.

Cierto, aún faltan títulos para actuales plataformas como WatchDogs, Assassin’s Creed IV: Black Flag, Destiny, Titanfall, entre otros, juegos multiplataforma que incluso compartirán lanzamientos con los nuevos Xbox One y PS4. De esta manera, Grand Theft Auto 5 es el último juego significativo de esta era en alta definición y que solo veremos en los sistemas presentes de Sony y Microsoft, un poderoso empujón para los últimos años en términos de lanzamientos periódicos.

¿Por qué apostarle a un incierto nuevo mercado como el de Xbox One y PS4? ¿Cómo no ir a la fija en ventas con dos consolas que tienen en la actualidad millones de usuarios? Rockstar Games no es un novato en estos negocios y sabe cómo brindar experiencias nuevas con las mismas herramientas de hace siete años. Lo hizo antes, lo sigue haciendo.

No se trata de imágenes ultra realistas (por lo menos no por ahora), ya que por la misma ambición de hacer mundos abiertos impresionantes, no es algo en lo que la compañía consiga un 100% de efectividad, aunque si un porcentaje muy alto de todas formas. Se trata de la jugabilidad que por primera vez está a punto de cambiar la tradición de la saga con aquello de controlar tres protagonistas de manera alterna en lugar de uno solo. Se trata de darle vida a un sandbox como nunca antes, un mundo abierto tan complejo en su aspecto urbano como el de GTA 4 pero ubicado en la costa oeste americana, mezclado con el agreste y salvaje terreno rural que nos presentó John Marston en su obra maestra del 2010.

Este es Grand Theft Auto 5, no necesita publicidad ni hype, ya que ese tren se mueve solo, pero aún con la esperanza del futuro para Xbox 360 y PS3, junto con los otros seis años que les quedan como mínimo en su ciclo de vida, no existe otro juego que llegue a ese nivel de ambición en libertad y opciones de elección.

La nueva generación se trata de jugabilidad, no de plataformas, por lo menos Rockstar Games entendió eso desde hace mucho, y tendrá la amabilidad de compartirlo con nosotros en muy poco tiempo.