Reseña Ridge Racer 3D
“Sistema De juego que se respete debe contar con su respectiva versión del famoso árcade de carreras”. Tal parece que esta frase se ha convertido en una máxima con las más recientes consolas y portátiles. Nintendo y su 3DS no podía ser la excepción.
El catalogo inicial de juegos de 3DS resultó relativamente escaso en nuestro país, pero fue sólo cuestión de semanas para que estuviéramos al nivel de las demás regiones del mundo; ahora con una oferta mucho más abultada, Ridge Racer 3D se revela como una de las mejores opciones a tener en cuenta.
Eso sí, Ridge Racer 3D no destaca precisamente por la novedad, todo lo contrario, le apunta a mantener y mejorar las buenas sensaciones que este título viene dejando a lo largo de los años; especialmente en la siempre querida y nunca olvidada veterana versión aparecida en la primera consola PlayStation, versión de la que toma gran parte de sus contenidos y los redefine magistralmente en una pantalla portátil tridimensional.
¿Bastaría algo como esto para querer hacerse con este juego?, obviamente esto depende del gusto de los usuarios; no obstante, Ridge Racer 3D cuenta con unos más que interesantes argumentos como para ubicarlo entre los mejores juegos del catalogo inicial de 3DS. En las siguientes líneas pasaremos a detallarlo…
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¿Qué tal los gráficos?
Una frase podría resumir muy bien el apartado gráfico: Ridge Racer 3D entra directamente por los ojos. Es imposible no quedarse deslumbrado ante la belleza de los entornos visuales que ofrece en sus primeras pantallas. Si alguien dudaba sobre la diferencia que se puede obtener al disfrutar con una pantalla 3D, pues este juego tiene la respuesta y es contundente.
Aunque contamos con 15 pistas (el doble en la medida en que podemos recorrerlas en sentido contrario) y que la mayoría son tomadas de los anteriores juegos, hay que reconocer que la sensación que trasmite es distinta y todo gracias al efecto en tres dimensiones.
La sensación de profundidad es tremenda, ver como los edificios y las montañas se acercan es algo impagable, por citar un ejemplo: ¿recuerdan el helicóptero que hace acto de presencia en las anteriores entregas? Acá retorna y de qué manera; es realmente sensacional.
Puestos a pedir, el diseño de los autos no llega a convencer tanto como el resto del escenario. No es que estén mal diseñados ni mucho menos, pero algunas de sus texturas revelan fallos. A esto le sumanos que no se muestran tantos vehículos como se podría esperar, pero de esto se hablará en apartado de jugabilidad.
¿Qué tal suena?
Ridge Racer 3D es heredero de una saga cuyo apartado musical le brindaba grandes dosis de identidad, así que no se podía esperar menos en dicho sentido; encontraremos una buena variedad de temas estilo electrónico con las que podremos ambientar cada circuito. Incluso existe la posibilidad de cambiar el tema según nuestra preferencia.
A decir verdad, da la impresión de que el catalogo musical no es tan amplio como se pudiera esperar, si bien es cierto que en este tipo de juegos, donde la velocidad y la precisión son tan importantes, la variante musical queda prácticamente en un segundo plano.
Cualquier seguidor del género se sentirá a gusto, pero seguramente también coincidirá en que aquí lo importante es que la música de fondo no altere ni distraiga (y que sea buena por supuesto) y en ese sentido Ridge Racer 3D cumple con creces.
La narración de partida permanece en ingles y existen algunos (muy pocos) comentarios en dicho idioma que amenizan especialmente el punto de partida; por lo demás el juego se encuentra en perfecto español, una política de Nintendo que se agradece y que estaremos atentos para que se mantenga en todos los juegos venideros de la portátil.
¿Qué tal se juega?
La dinámica de Ridge Racer 3D se mantiene como era de esperarse, su modo principal consiste en un torneo compuesto de numerosos circuitos en donde partiremos de octavos hasta llegar al primer lugar. En las primeras trazadas se permite llegar de tercero o segundo pero al final únicamente el primer lugar permitirá clasificar y continuar en el torneo.
Las otras opciones se derivan de la anterior, es así como tendremos partidas contra reloj y contra rivales en multijugador local (únicamente con 4 jugadores); en ese sentido se extraña un buen modo online que seguramente habría dado muchas más horas de diversión y variedad.
Por supuesto, la variedad en Ridge Racer 3D está en ir desbloqueando nuevos autos, hasta llegar a 104, y mejorar los que ya tenemos. En ese sentido, hay una interesante gama de personalización que da muchas más horas de vida a un título que en promedio puede superar las veinte horas (más que interesante para un juego de un sistema portátil).
Evidentemente, la gracia en Ridge Racer 3D radica en los derrapes para superar a los rivales, en esto ningún otro juego lo hace mejor y es lo que le da su estilo tan particular. Para la ocasión los diseñadores lo han configurado de modo que resulte mucho más intuitivo, si bien la dificultad se ha mermado un poco, de modo que la sugerencia para los jugadores más experimentados será ajustarlo de manera más exigente.
ABSOLUTAMENTE RECOMENDABLE PARA…
– Los amantes de los derrapes, la música y la linda japonesita que siempre nos muestra esta saga.
– Quienes esperan encontrar las ventajas de jugar con un visionado en tres dimensiones.
– Recordar los buenos tiempos que la jugabilidad de este título ya ofrecía en las épocas de PSX y Nintendo 64.
– Desbloquear todos los eventos y hacernos con todos los autos, que no son pocos.
ALGO MENOS RECOMENDABLE PARA...
– Los que busquen opciones online, una vez más, lo mejor será hacerse con otras alternativas en el catalogo de 3DS.
– Quienes prefieran la simulación que el estilo árcade, lo mejor será hacerlo a un lado.
– Quienes esperen una mayor dificultad, si bien el reto en los circuitos más avanzados es de tener en cuenta.