Hellblade Senua’s Sacrife: Un sacrificio que aplaudir

María Parra – Honestamente el juego nos tenía ansiosos, porque Ninja Theory apostó todo a pesar de los riesgos y vaya que su sacrificio ha sido para aplaudir. Los autores de Enslaved nos sorprendieron al presentar este desarrollo que tenía un aire mucho más independiente, te adelanto gamer que el análisis más allá de decir si vale la pena o no jugarlo, es para dar a entender que estamos ante una obra que se ha ganado claramente la descripción de “única y hermosa” porque así ha sido la sensación de jugarlo.

Alguno de los puntos por los que este juego me ha llamado tanto la atención, más que su temática, gráficos u otras características, ha sido Ninja Theory en sí; quienes siguen su pista saben que este juego era una apuesta diferente y arriesgada luego de tantos años trabajando para terceros en forma de distintas editoras, con Hellblade decidieron poner eso a un lado y enfocarse en un proyecto independiente, un paso de esos que no tienen red de seguridad pero que les ha salido mejor de lo que muchos esperaban.

El equipo británico financió y distribuyó esta obra, sus acciones por desarrollarlo es a lo que yo catalogaría, como fanática de la saga de Assassin’s Creed que soy, como un auténtico salto de fe (y les salió mil veces mejor que el primero que me tocó hacer). Este movimiento pudo haber causado muchos problemas a futuro y un montón de “te lo dije” por parte de mis amigos gamers que siempre me criticaron por tener esperanza en esta obra, así como los múltiples “expertos” de la red, hoy con su estreno y tras haberlo probado puedo decir claramente ¡Se los dije!

Con Senua’s Sacrife no todo fue una inmersión en lo desconocido, quienes conocen Enslaved o Heavenly Sword pueden encontrar varios de sus elementos característicos en la obra, por lo que se puede decir que Ninja Theory pese a todo, no estuvo incómodo en su desarrollo y eso se hace sentir dentro del juego, lo más destacable de sus trabajos se puede notar dentro de la experiencia jugable, uno de sus grandes puntos a favor.

El título posee mucha identidad propia y una enorme personalidad, eso sin mencionar a su particular y torturada heroína, que con cada paso va colocando a sus jugadores en un ambiente rodeado de acción y aventura, pero también, emocionalmente hablando, las cosas no son fáciles, porque como jugador terminas simpatizando con su Senua y esto trae sus tragos amargos. 

Un camino caótico.

En el título nos encontraremos siendo Senua, personaje que da nombre al juego y que se sale de los estereotipos que últimamente han aparecido en el género, logrando así una protagonista muy peculiar y difícil de olvidar ¿Por qué? Cuando avanzas en el juego puedes describir a Senua en dos particularidades, una de ellas no la voy a decir puesto que esta se irá descubriendo en el desarrollo del juego; hay que resaltar que esta característica es la que logra hacer que el viaje sea tan…particular, como logra serlo.

Hay algunas peguntas que muchos se harán en el inicio del juego pero que, aunque muchas quedan claras, es un auténtico deleite como se han encargado de presentarlo en detalle mientras nos adentramos a estas profundidades retorcidas que cada vez se adueñan más de nosotros.

Debo aplaudir y resaltar la forma en que sus guionistas se encargaron de transformar el inicio, que puede ser bastante común para algunos, en algo totalmente diferente, que se va transformando con cada minuto que pasa en una situación que no te deja soltar el control, especialmente en sus últimos momentos.

¿Una duración justa?

Me he encontrado con muchas críticas por parte de jugadores y portales web que ponen de forma negativa la duración del juego, la campaña dura entre 7 a 9 horas más o menos o un poco más si nos va mal con los puzles pero no es un juego donde la duración deba ser el punto para catalogarlo como bueno o malo, puesto que lo que los jugadores se topan en el tercio final del juego los dejará con una sensación satisfactoria, en mi caso no pude separarme de la televisión y es casi un crimen hacerlo, la fantasía del juego te atrapa, así como el misterio en los alrededores de Helheim; ¿Qué es lo que viene? ¿Qué es lo que va a pasar? Los resultados no defraudaron mis expectativas y las ganas de saber qué va a pasar se vuelven cada vez más asfixiantes.

La locura está allí

No estamos solos, y no, no es una afirmación al estilo de “veo gente muerta”; en este caso hago referencia a esa psicosis de la que sufre nuestra protagonista, en donde mientras jugamos podremos “disfrutar” de la compañía de voces que se alternan y que hasta dan consejos o ideas totalmente sin sentido alguno; no es exagerado decir que a veces el cerebro de Senua va en direcciones totalmente distintas a la que marcan sus pies, su mente es un mismísimo caos y nos vamos hundiendo en el de forma inevitable.

Estas voces son uno de sus puntos más resaltantes del juego porque se ha logrado un trabajo de audio estratosférico que hasta el propio título recomienda usar cascos para que el efecto sea todavía mejor (y créanme, vale la pena), en partes del juego no te darás cuenta si la confusión y el desconcierto la sufre Senua, tú o ambos.

La locura está servida y llega sin parar, puesto que la cabeza que cuelga del cinturón de ella tampoco es que ayude mucho a la cordura porque también se comunica con nosotros lo que hace que se cree una extraña y peculiar relación de lo más delirante entre ambos (y te incluye).

Todo tiene un por qué

Todos los puntos antes hablados que construyen a este delirio ambulante tiene su explicación que llega con una gracia absoluta en el último tercio del juego, que repito son el cierre definitivo y que se merece un juego como este. Todo termina por ser orquestado perfectamente hasta llevarnos a la razón de todo lo que hemos pasado y la explicación de esta historia que va en todas las direcciones posibles, llevándonos a un argumento mucho más…épico, de lo que imagina nuestra mente.

Si bien a Ninja Theory se le da bien el arte de escribir y elaborar grandes historias, este es un juego que sirve perfectamente como ejemplo de ello, no dejan de cuidar cada aspecto de la trama y no deja nada de esta locura sin una razón; la historia se hace entendible, no presenta una narrativa entorpecida ni vacíos, es lo que un jugador veterano catalogaría como ver a la compañía en su máxima madurez.

¿Un juego necesita muchos personajes, historias complejas o un sinfín de giros para funcionar? Lo cierto es que no, y aquí está el claro ejemplo, vale además acotar que tampoco hace falta ninguno de estos detalles para crear personajes que logren desarrollar nuestra empatía hacia ellos hasta el punto de tener una sensibilidad con estos. Si hay que aplaudir algo, sin duda alguna, es la creación del personaje y a su vez su bien llevada narrativa.

El desafío nos rodea.

“No voy a jugar algo que parece más una película que un juego”  dicen muchos por allí, lo cierto es que Hellblade no es lo que muchos catalogan como “una película jugable”, al contrario, el estudio ha logrado implementar de una forma muy bien lograda la jugabilidad en la narrativa. Su cantidad de cinemáticas es justa y lo que tiene que contarnos el juego no lo hace mediante de ello porque la apuesta ha sido que los descubrimientos los jugadores lo vivan con Senua.

Si eres de los que les gusta pasar por los escenarios rápidamente sin apreciar ningún detalle te recomiendo ir con calma, acá son más que el lugar en donde se desarrolla la acción. Primeramente hay que destacar el talento de los artistas y en segundo, que cada lugar brinda una cantidad de información enorme si ves con detalle las cosas.

Aquí es donde encontramos el punto negativo del juego y por el cual algunos quizás lo crucificarán, que no es lo que se merece; Ninja Theory ha querido que todos los elementos del juego tengan sentido y estén unidos entre sí por ello la libertad es escaza y nos encontramos con un juego que tiende a ser muy limitado; si eres de aquellos jugadores que les gusta gozar de libertad en sus juegos esto puede ser algo que chocará mucho con sus gustos, hasta tal punto es este aspecto que no existe ningún trofeo por descubrir algún objeto durante alguna exploración.

Lo que sí hay que decir es que pese a que la primera parte del juego se rige por estar avanzando por estos lugares de extremo cuidado artístico, lo que queda claro y puede percibirse es que el estudio ha arreglado muy bien el ritmo del juego, dándonos desafíos durante nuestros avances; a lo largo de la historias nos conseguiremos con plataformas, desfiladeros, hacer equilibrio por zonas al mejor estilo circense y demás.

Encontremos muchos puzles, uno de los motivos por el que nos sorprendimos al tratarse de una fórmula que apuesta más a la acción y aventura; honestamente estos rompecabezas no producen mayores dolores de cabeza y se pueden clasificar en tres tipos diferentes, lo que si no puede dejarse pasar es que los puzles no son un elemento aislado o extraño porque realmente encajan perfectamente con la narrativa del juego, pese a que la dificultad de los mismos no son su punto fuerte, esto se equilibra con lo ingenioso que son, además que desencadenan en situaciones que, artísticamente hablando, son sublimes.

Combates temibles

El juego no es en su totalidad puzles, también tiene presencia los combates y estarán presentes a menudo sin embargo estos no están por estar, si hay que pelear es porque hay una necesidad que nace de la narrativa del juego, es porque la campaña así lo exige; por ende es posible en algunos momentos no encontremos enemigos cerca, sin embargo cuando aparecen su aspecto nos deja sin palabras, no solo por lo temible de su apariencia sino por lo cuidado de su diseño.

Los combates se basan en peleas cuerpo a cuerpo, donde somos testigos de una elegancia de movimientos por parte de Senua que se ve acompañado de un salvajismo en sus mandobles y patadas que nos dejan ante una sanguinaria y mortal combatiente. Ojo, las acciones que se pueden realizar son limitadas, no como en otros juegos del estudio como DMC, además de que solo contamos con un arma o dos; otro punto que me ha chocado es que hay un poco variedad de enemigos, por lo que es sencillo agarrar el ritmo de las peleas y con ello terminan faltando las sorpresas.

El juego ofrece combates impactantes, la fórmula funciona pero quizás pudieron pulir más este aspecto. Lo que sí ha logrado Ninja Theory es incluir una serie de situaciones que hacen que no nos quedemos en la monotonía, ya es de tu parte descubrir cuáles son;  Hellblade pese a sus fallas logra una combinación interesante, coquetea con el terror de una forma sutil que queda como anillo al dedo, especialmente al encontrarnos en semejante oscuridad.

La muerte: un adiós permanente

Te lo habíamos adelantado, la temible muerte permanente existe y tendremos que decirle adiós a la partida si no cuidamos nuestros pasos. Recordemos que la locura está presente, que las voces nos asechan y que de un momento a otro la oscuridad terminará por adueñarse de nosotros en su totalidad.

¿Es realmente necesario la falta de checkpoint? Algunos lo han criticado por catalogarlo como injusto pero no lo es en lo absoluto, es otro elemento que no ha sido puesto al azar, si realmente te ves inmerso en el juego te das cuenta que es un elemento que va acorde a la narrativa.

No es un punto del cual haya que preocuparse mucho, puesto que como se ha mencionado anteriormente, la dificultad del juego no es alta pero tener esa posibilidad allí, esperando por nosotros, ayuda a que la paranoia no nos abandone y realmente nunca lo hace.

Un deleite artístico

El videojuego es una total obra de arte y un deleite audiovisual que disfrutan tanto los amantes de este arte como los que no, ojo, no porque sea descrito de esta forma quiero decir que el juego solo se basa en ello, puesto tiene miles de elementos por los que podemos catalogarlo como un juego increíble.

El cuidado que ha puesto el estudio a la creación de los escenarios y el delineado de los personajes es digno de admiración además de su excelente talento para hacerlos memorables, tanto héroes como villanos que no son descuidados en ningún aspecto; Senua es sin ninguna duda un personaje bien logrado en lo narrativo y en lo artístico, verla sin ninguna duda en esta danza con la muerte es un auténtico placer visual, aun si no somos los que estamos con el mando en las manos.