Marvel vs Capcom Infinite vs crítica

María Parra – Marvel vs Capcom Infinite no ha parado de ser noticia desde su lanzamiento, el atrevido videojuego de lucha ha ido a parar una y otra vez en las garras de la crítica desde que fue presentado, muchos jugadores no se animan a jugarlo y optan por la burla pero ¿realmente vale la pena? No es un juego para destruir pero tampoco un indispensable de lucha como se quería que fuera.

El juego habría sido presentado durante la Playstation Experiencie del año pasado, sin embargo, no tuvo una muy buena impresión el público, eso sin contar que en cuanto a comunicación no han sabido responder debidamente o con la rapidez necesaria a las polémicas que se iban tejiendo alrededor del título.

El videojuego ha agregado varios aportes interesantes a su jugabilidad, pero pese a ello los que ya conocen la franquicia sentirán que quizás esto pudo dar para más y ser explotado todavía más, eso sin mencionar algunos detalles del apartado técnico y las polémicas que hemos hablado durante los últimos meses.

Contenido suficiente

Uno de los temores que tenía con la llegada del juego era que cometiera el mismo pecado mortal que ocurrió con Street Fighter V, algo que la editora nipona pareció entender y por ello Marvel vs Capcom Infinite ha llegado con bastante contenido para todos los amantes del juego en solitario. Posee su modo arcade tradicional, desafíos y una campaña en donde vamos conociendo la historia que ha llevado que todos estos universos choquen nuevamentem.

Está claro, es visible, la compañía imita los modos historia de Mortal Kombat e Injustice, pero hay característica que separa a ambos notablemente.  Ahora ¿La campaña realmente emociona? No, es uno de los puntos que pudo desarrollarse dentro del título de mil maneras y colocan al jugador en una historia insustancial que ustedes al probarla podrán opinar sobre la misma.

Refrescando la fórmula

Una característica de la franquicia son los combates en equipos de tres, ahora las peleas se harán en pareja, cambiando la fórmula acostumbrada de hace 17 años; este punto es muy importante porque el juego participará en la Capcom Cup, y no es un secreto para nadie que a veces resulta difícil seguir las asistencias de los personajes por lo que s eha dejado fuera el sistema Assist.

Sin Assist ¿qué tenemos?

El juego cuenta con un nuevo sistema bautizado Active Switch, el cual recuerda mucho al jugado en Street Fighter X Tekken, en donde mientras uno realiza un ataque se puede convocar al compañero para que siga combinando una tanda de ataques; puede que el cambio primeramente se sienta extraño pero no está mal.

Gemas del infinito.

Las gemas del infinito no son cualquier agregado, sino que es mejor que las tengas en cuenta, en los combates online no solamente importa la sinergia de los peleadores sino el uso de dichas piedras, que darán un nuevo poder a los luchadores y también una nueva habilidad llamada Infinity Storm, con la que podemos cambiar totalmente el resultado de un combate.

En cuanto al plantel de luchadores, hay algunas cosas que pueden chocar para muchos, aunque hay 30 peleadores para escoger hay ausencias que se sienten que hacen que los amantes de la saga no se sientan animados por el juego, claro ejemplo de ello el caso de Wolverine. ¿Hay grandes novedades? No lo suficiente.

Gráficamente choca

Una de las decisiones que más ha creado polémica es sin duda el apartado visual del juego, dejando a un lado el cell-shading de Marvel 3 para ir por un estilo estético mucho más duro, convirtiendo a los héroes en una montaña auténtica de músculos. Aunque hay rostros que aplaudimos también hay que decir que los escenarios y el trabajo de modelados ha sido deficiente, haciendo que los puntos malos opaquen a los buenos y dando más material a los haters del juego.

Otro punto para ellos es que no se ha construido un HUD a la altura, no hay grandes alardes en la pantalla y podríamos decir que incluso sus animaciones en la campaña son un tanto toscas, recordándonos un poco a Street Fighter V, solo que con algunos resultados superiores.

Su banda sonora no es mala pero no logra superar o compararse a la de su anterior entrega; otro punto quizás para los más quisquillosos, es que no contamos con el doblaje japonés, por lo que no se puede escuchar a Ryu, por ejemplo, hablando en su idioma original.

Un aspecto que sí se tomó en cuenta es la dificultad al momento de subir de nivel en este nuevo juego, puesto que incluso la editora ha decidido crear una liga de novatos para todos los jugadores que se encuentren en el rango 15, todo esto para que se pueda disfrutar de combates en igualdad de condiciones y no se repita lo que ocurrió con SFV, otra de sus grandes polémicas.

Uno de los puntos que es imposible dejar de nombrar es su edición coleccionista con la cual muchos jugadores se sintieron estafados, si el juego causa en sí un mar de emociones que chocan, entre lo malo y lo positivo, es sin duda este desliz (que le costó muchos euros a algunos jugadores emocionados) los que nos hace no darle una clasificación más alta.

El juego no es malo pero quienes son jugadores frecuentes estarán de acuerdo conmigo: Pudo ser algo increíble.

Nota: 7.5

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